“Cuenta la leyenda que en Guatemala se esconde una criatura maligna a la que los pobladores llaman lagarto escorpión, un ser que repta por los bosques secos subtropicales y deja muerta toda la vegetación a su paso…es capaz de escupir fuego y usar su cola para inyectar un veneno tan letal que incluso puede atravesar la sombra de sus víctimas para intoxicarlas. Su aliento produce mareos y confusión, y se lo puede identificar a lo lejos debido a que los relámpagos que caen durante las tormentas impactan sus madrigueras en la selva.”- Lagarto enchaquirado, el reptil del veneno de oro.
National Geographic Español